Retenedores

Cuando finaliza el tratamiento de aparatos fijos y éstos son retirados, es muy importante mantener los resultados que tanto esfuerzo han supuesto para el paciente. Para esto se emplean unos aparatos llamados retenedores, que pueden ser fijos o removibles. La función de los retenedores es mantener cada pieza dentaria en su posición adecuada hasta que el hueso y las encías se adapten al cambio. Los retenedores son empleados para afianzar los resultados de la ortodoncia y conservar esa sana sonrisa.

Retenedores fijos

Retenedor 3×3

Este tipo de retenedor fijo consiste en una barrita muy fina que se pega a los dientes por la parte de atrás, de forma que es un aparato invisible. Al fijarse en cada pieza los retenedores se adaptan perfectamente a la dentadura del paciente. La higiene es fácil de mantener con este tipo de dispositivo. El retenedor 3×3 tiene una gran capacidad retentiva.

Retenedores removibles

Placa Hawley

Dentro de los retenedores removibles, la placa Hawley es uno de los retenedores más usados tras el tratamiento de ortodoncia. La placa de Hawley se compone de un arco vestibular y de dos tipos de retención tipo Adams. La función principal de este retenedor es mantener a las piezas dentales en su posición después de haber sido movidas por la ortodoncia.

Retenedor invisible

Este retenedor es transparente, fino y muy cómodo. El retenedor invisible suele utilizarse en adultos por tratarse de un material frágil. El material termo-rígido invisible de este retenedor lo convierte en un aparato estético muy empleado para los más mayores.